domingo, 25 de noviembre de 2012

¿Cómo autoinculparse decenas de crímenes?


Sture Bergwall es la persona que se autoinculpó 32 crímenes, de los cuales fue condenado por 8. Sture Bergwall fue ingresado hace 21 años en una clínica psiquiátrica en Suecia, por los supuestos asesinatos que había cometido, de los cuales se le han retirado 5 condenas, al probar que no tenía nada que ver con lo ocurrido, y en los últimos días se le ha exculapdo también del asesinato de 2 chicas noruegas.


La autoinculpación comenzó cuando Sture Bergwall afirmó que había estrangulado a un niño de 11 años a la salida del colegio, relatando cómo montó al niño en el coche, le llevó a un bosque, y allí acabó con su vida.
Aún quedan por descubrirse 2 asesinatos de los que él propio se autoinculpó, el de un chico de 15 años que Sture Bergwall asegurá que despedazó su cuerpo, y el de una pareja de holandeses que fueron encontrados con numerosas puñaladas.

Ahora su abogado declara que estas inculpaciones, y con ellas sus condenas serán retiradas en poco tiempo, ya que alega que todos los caso fueron construidos sin datos que le inculpen directamente, como la presencia de huellas, ADN, testigos, etc…

En muchas ocasiones, Sture, daba datos incorrectos de las víctimas, pero en la clínica, le recordaban los detalles y datos básicos de los crímenes, a modo de terapia. A causa de esto, un psicólogo fue acusado de usar métodos manipulativos para que Bergwall construyera las historia que no distaran de la realidad de los crímenes.

Todas las investigaciones dieron un brutal giro cuando el periodista Hannes Rastam consiguió hacerle una entrevista en la que el supuesto asesino alega que mintió, y así se autoinculpó de los asesinatos para que le administraran ansiolíticos de manera legal, y así tener la sensación de ``pertenecer a algo´´.

También es impactante la siguiente declaración de Sture Bergwall: ``Desde el principio quise dar marcha atrás en mis confesiones. Pero me avergonzaba hacerlo.´´.

domingo, 18 de noviembre de 2012

IKEA: La esclavitud como forma de producción



Ikea, la  famosa cadena de tiendas de muebles y complementos de decoración ha reconocido que usó presos políticos de Alemania del Este, e incluso de Cuba, como mano de obra.
La investigación ha sacado a la luz esta trama, que afirma que tales presos fabricaron estos muebles hace al menos 25 años.

A través de la investigación se ha dado a conocer que fue entre los años 70 y 80 cuando esto ocurrió; la investigación comenzó tras las acusaciones de algunos de los numerosos presos involucrados, los cuales afirman que produjeron diversos tipos de artículos para Ikea durante su estancia en la cárcel. 
 

El contrato al que se encontraban sujetos estaba compuesto por la producción de sofás, cerca de 10.000 mesas infantiles y aproximadamente unas 35.000 mesas de comedor.



La empresa sueca, Ikea, a declarado que por aquel entonces no disponían de ningún sistema de control que pudiera haberlo evitado; afirman que si el sistema hubiera sido el mismo que el actual, el hecho de que utilizaran a presos políticos para la fabricación de dichos productos nunca se hubiera producido.